Sistemas fotográficos de alta precisión y uso de equipos de ultrasonido son parte de la nueva tecnología de control de calidad implementada en la fábrica de Ford de Almussafes, en Valencia, España, la cual se ha convertido en pionera en el uso de esta tecnología, que garantiza la instalación adecuada de todas las partes que integran el motor.

La inspección se lleva a cabo mediante la toma de fotografías de cada uno de los dos mil motores que salen de su línea de producción y montaje diariamente y son capaces, con el apoyo de ultrasonidos, de detectar la más mínima falla dentro de el motor fabricado.

Eduardo Guillamón, gerente de Ingeniería de la planta, señaló que:“ Trabajando en la banda de frecuencias del ultrasonido y ampliando las redes neuronales podemos determinar si un conector eléctrico está o no montado adecuadamente”.

En la actualidad se cuenta con más de 300 cámaras, cifra que irá en aumento, platicó un entusiasta Xavier Garciandía, ingeniero de visión en el Departamento de Nuevas Tecnologías, y que es otro de los involucrados en este interesante proceso de calidad.

Xavier explica que cada día se llevan a cabo la toma de aproximadamente 2,050,000 imágenes, es decir, cada 40 milisegundos se realiza el levantamiento de una imagen, lo que se traduce en 1,000 imágenes por segundo, algo verdaderamente impresionante, lo que permite registrar a detalle cada una de las piezas instalas en un motor.

Este proceso captura más de mil millones de fotos cada catorce días. Cifra equivalente a las publicadas en la red social Instagram en Europa en un periodo similar.

Texto: Raymundo Espinosa.

Foto portada: ABC.