Razones para cambiar el líquido anticongelante
Con el paso del tiempo, el glicol, comienza a perder sus propiedades de protección o de absorción de la temperatura, por lo que termina siendo simplemente agua lo que evita que un motor se sobre caliente.
Cuando esto sucede, los vapores que se generan dentro del sistema de enfriamiento comienzan a generar oxidación en los componentes de metales ferrosos, iniciando un proceso de corrosión que daña al auto.
La oxidación al interior del sistema de enfriamiento del auto, genera que se formen piedras de sarro dentro de los ductos, especialmente en las tuberías metálicas, en dónde se unen con las mangueras del sistema de enfriamiento. Esto ocasiona que las mismas piedras, comiencen a ocluir el paso del líquido anticongelante por los ductos y se termine por generar un esfuerzo innecesario en la bomba de agua encargada de conducir el coolant.

¿Cuándo cambiar el líquido anticongelante?
Es recomendable realizar el cambio del refrigerante una vez al año, para evitar que la pérdida de las propiedades deje expuesto al motor.
Otro motivo para cambiar el líquido anticongelante, es si notamos que la temperatura del auto ya no se mantiene en su nivel operacional ideal, esto, ocasionado porque el líquido ya no está enfriando como debería.

¿Cómo cambiar el líquido anticongelante?
Para cambiar el líquido anticongelante, deberás realizar las siguientes acciones:
- Drenar el coolant que deseas reemplazar y posteriormente asegurarte que no ha quedado nada de residuos, para lo cual, puedes pasar agua por el sistema con el motor del auto encendido y el tapón de drenaje abierto para eliminar cualquier residuo.
- Una vez que se ha limpiado por completo el sistema, puedes cerrar el tapón y rellenar el depósito del anticongelante con el nuevo líquido refrigerante.
Nota: Es importante que, mientras rellenas el depósito, mantengas el tapón del radiador abierto, para evitar que se queden burbujas de aire entre el líquido anticongelante dentro del sistema.
Algo que tenemos que recordar es que ningún líquido que agreguemos a nuestro auto durará para siempre, por lo tanto, es necesario realizar un mantenimiento continuo para verificar que todos los líquidos estén en sus niveles y funcionando de manera óptima.