El Hennessey Venom GT acaba de convertirse en el coche más rápido del mundo. Pero, pese a haber superado el récord de velocidad, no ha entrado en el libro Guinness y el trono sigue siendo del Bugatti Veyron. ¿Por qué?


La pugna por crear el coche más rápido del mundo pasa a la siguiente ronda. Después de que el Bugatti Veyron Super Sport entrara oficialmente en 2013 en el libro Guinness de los Récords por haber alcanzado los 415 km/h (limitados por la propia marca), otros contrincantes saltan al ruedo. Uno de ellos es John Hennessey, que no quiere dejar escapar su oportunidad: su Hennessey Venom GT ha vuelto a rodar por una pista de la NASA y el resultado del americano no ha dejado lugar a dudas: 270,3 mph, o 435,2 km/h, tal y como registraron los satélites del sistema de medición. Esta no es la primera vez que el Hennessey bate el récord de velocidad: el año pasado alcanzó los 427 km/h. 

El Hennessey Venom GT está equipado con un motor V8 7.0 biturbo que ofrece una potencia total de 1.244 HP (su relación peso/potencia es de 1 Hp/kg). 

Sin embargo, este superatleta no entrará por el momento en el libro Guinness de los Récords. ¿El motivo? Los responsables de dicho libro exigen que el coche de calle más rápido del mundo sea producido hasta un mínimo de 30 unidades para considerarlo como tal. Del Venom GT solo se han planificado 29, y por el momento llevan fabricados 11. Según apunta ElMundo.es, otro de los motivos para que el récord del Hennessey Venom GT no sea reconocido por el Libro Guinness es que debió recorrer la pista en ambos sentidos para establecer una media que compensase su inclinación. 

Otro dato a tener en cuenta: el Bugatti Veyron Super Sport de 1.200 HP fue medido en su día sin la limitación de velocidad y alcanzó los 431 km/h en una ocasión, y los 434 km/h en otra. Estos resultados tampoco fueron tenidos finalmente en cuenta por la organización Guinness, porque el coche solo se vende con limitador.  

Hay otro aspirante al título en este ring tan apasionante: el Shelby Ultimate Aero lanza una y otra vez el guante al Veyron, y de hecho en 2007 le arrebató el récord de velocidad al italiano, al alcanzar los 412 km/h. En 2010, Bugatti recuperó su cetro, y lo revalidó más tarde con el Veyron Super Sport ¿Volverá a intentarlo Shelby Super Cars? La emoción está servida. 

Fuente: Autobild.es