Parte de las innovaciones que el consorcio Jaguar Land Rover está desarrollando para implantar en un futuro no muy lejano, es la inclusión de sensores ultrasónicos capaces de detectar incluso las condiciones del terreno por las que circula el vehículo (grava, asfalto, hierba, nieve, humedad, etcétera).

El proyecto denominado “Autonomus All Terrain Driving” (Conducción Todoterreno Autónoma), cuya inversión en investigación asciende a varios millones de libras, tiene como objetivo desarrollar un vehículo que circule con o sin conductor en cualquier condición meteorológica o en cualquier tipo terreno, incluyendo carreteras y superficies extremas, de forma segura.

Los sensores usados en dicho proyecto son la base para la conducción autónoma, pues estos tendrán como función “ser los ojos” del auto y del conductor, además de que la inteligencia artificial que se ha diseñado le permitirán tomar decisiones y planificar las rutas en cada viaje.

Algunas de las asistencias con las que contarán estos vehículos, gracias a los sensores ultrasónicos son:

- Surface Identification and 3D Path Sensing: Combina cámara, ultrasonido, radar y sensores LIDAR (para ofrecer al vehículo una visión de 360 grados), con sensores tan avanzados que permiten determinar las características de la superficie, hasta la anchura de un neumático, incluso si llueve o nieva.
- Terrain Response: Capacidad de cambiar la ruta de acuerdo a la superficie, ya que puede identificarla a 5 metros de distancia. Esta adaptación al camino, optimiza el rendimiento todoterreno sin pérdida de impulso ni control.
- Overhead Clearance Assist (Control de distancia de alturas): Utiliza una tecnología estereoscópica para detectar obstáculos elevados. Al programar el sistema con la altura del vehículo, que puede incluir equipaje o bicicletas en el techo, el vehículo avisa al conductor si hay espacio suficiente con un sencillo mensaje en la pantalla táctil de info-entretenimiento.
- Terrain Based Speed Adaption (TBSA) (Control de la velocidad según las superficies): Capaz de predecir el impacto potencial de estas superficies en la conducción y adaptar de manera automática la velocidad para preservar el confort de los pasajeros.
- Dedicated Short Range Communications (DSRC): Integra tecnología para la comunicación inalámbrica de corto alcance, permitiendo la conexión entre dos vehículos (V2V), para compartir información como ubicación, deslizamientos, cambios de altura de la suspensión y articulación de los ejes, así como las configuraciones de All Terrain Progress Control (ATPC) y Terrain Response.

Si te interesa conocer el funcionamiento de este novedoso sistema de conducción, revisa los siguientes videos:

Información proporcionada por Jaguar Land Rover México.