En 1990 los japoneses de Honda decidieron poner en las líneas de producción un vehículo que ha ganado cada pedazo de emocionante historia y reconocimiento que hasta hoy mantiene.

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Por ello si tienes un Honda NSX de primera generación y deseas modificarlo, debes pensarlo muy bien, pues su valor de unos 50 mil dólares podría verse afectado, claro si no cuenta con el kit de personalización de Liberty Walk, que lo podría catapultar hasta el doble de esa cifra (100 mil dólares).

Para entender un poco del por qué tanto valor hacia un auto noventero, es necesario saber que para cuando la marca nipona tuvo la brillante idea de ofrecer este vehículo al público en general, el NSX  ya había visto la luz unos 6 años antes durante en el Salón de Turín en 1984, bajo el nombre de Honda HP-X Concept o el Honda Pininfarina Xperimental, en honor al diseñador italiano de autos Pininfarina, quien tuvo que ver de manera notable en la creación, por lo que la conexión entre los fans y la nave fue casi inmediata, por lo que contó con una gran aceptación.

El auto venía precedido por una ola de condecoraciones y excelentes resultados en competencia producidos por otros vehículos de la marca, por lo que a este instante de historia romántica, se le agregó la cereza al pastel y esta fue el NSX.

Para la versión masiva del Honda NSX, se propusieron 20 disposiciones mecánicas, esto debido a diversas elevaciones de impuestos, (sobre todo para los motores altamente contaminantes) por lo que se optó por un motor V6 DOCH VTEC de 2.977 centímetros cúbicos en posición central,  que ofrecía 270 equinos de potencia a 7,100 rpm y 284 Newton metro de torque a 5.400 rpm, además de un cambio manual de cinco relaciones.

Fantásticamente  era capaz de acelerar de cero a 100 Km/h en 5,9 segundos para rebasar los 270 Kilómetros por hora.

De esta manera los ingenieros, en especial su jefe Shigeru Uehara (que por cierto también encabezó el diseño mecánico del popular S2000), estaban buscando la menor afectación del comportamiento dinámico y sus prestaciones para así poder competir con los rivales de la época: Porsche 911, Toyota MR 2 Y Ferrari 308 entre otros.

Su llegada al mercado significó mucho por sus múltiples atributos, entre los que destacaban un motor, chasis y carrocería en aluminio, un manejo sumamente deportivo, un peso de 1350 kg (menor que sus rivales), pero sobre todo el respaldo de la asesoría y colaboración de uno de los más grandes pilotos de la historia, Ayrtor Senna Da Silva.

Tras salir a venta masiva, los reconocimientos por la prensa especializada no se hicieron esperar, “Auto del año”, “Mejor deportivo de todos los tiempos”, y muchos halagos más fueron algunos de los titulares.

Su historia de triunfos en pista y comerciales continuaría hasta 2005, donde dicho sea de pasó se despidió con un motor V6 VTEC 3.2 con 290 equinos notablemente menos potente y con menor poder sonoro que el que porta el actual Civic Type R.

Sin embargo, eso no empaña para nada su historia y sólo nos deja un par de dudas. ¿Será capaz la nueva versión del NSX de continuar el legado tan grande de la versión NA1? Y por otro lado ¿Valen la pena las actualizaciones personales que Liberty Walk le hace?

No sé, probablemente es cuestión de percepciones, pero aquí te dejo esta galería y las adecuaciones que propone Liberty Walk para que lo disfrutes con más estilo.

Texto por: Ray Espinosa.

KIT de personalización Liberty Walk (Honda LB-Works Honda NSX) :

Bengalas de guardabarros de gran tamaño.

Faldones laterales.

Faldón delantero.

Difusor trasero.

Aleta.

Suspensión neumática en los estantes de Liberty Walk.

Sin actualizaciones mecánicas por lo que se adaptan a todas las versiones de NSX, incluso Coupé Y Targa.

Puedes ver la galería de personalización completa en nuestro FB carplanet.mx