Desde un accidente hasta las condiciones meteorológicas que nos dificultan la circulación pueden ser el detonante de un gran atasco en el tráfico. De hecho la simple incorporación de vehículos o carriles cortados por obras empeoran el tránsito cotidiano.
El "efecto acordeón" es común en un atasco cuando cada conductor acostumbra arrancar un segundo más tarde de lo que se pretende. Este efecto se ve multiplicado en un sólo kilómetro hasta el punto en que el último coche arranca dos minutos y medio más tarde que el primero en la fila. En promedio se puede llegar a generar unos 20 a 30 kilómetros de retraso y esto provocará casi una hora para que todos los coches de la vía se pongan en marcha. De igual forma al estar zigzageando o cambiando de carril varias veces con motivo de querer ir más rápido, generas todo lo contrario e incluso empeoras también este efecto acordeón.
Aquí te dejamos algunas recomendaciones que te pueden ayudar a pasar este mal rato con menos ansiedad y estrés para que puedas llegar a tu destino sin irritabilidad ni tensión: