En días calurosos los motores de los autos se esfuerzan más; y uno de los componentes más importantes para que se mantengan en una buena temperatura es el radiador. Este es una de las partes que más se usan y ensucian con el constante uso del auto y como todo lo demás requiere limpieza y mantenimiento.

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Para empezar, una limpieza al radiador del auto debe asegurar un mejor funcionamiento, pero antes de ello, dejarlo reposar unos minutos para que se enfrie lo suficiente, pues si el motor sigue en una temperatura elevada se corre el peligro de sufrir una quemadura, porque el líquido está hirviendo o altas temperaturas dentro del radiador.

Para comenzar se debe retirar la parrilla frontal del auto, ya que esto permitirá trabajar de mejor manera y más cómoda; así, con un cepillo y agua con jabón empezar a tallar la parte frontal del radiador, porque normalmente es la que más suciedad tiene con insectos y restos que se acumulan, y para ello se debe tallar en dirección de las rejillas o de lo contrario se dañarán, y después enjuagar con un poco de agua hasta remover.

Un paso importante es que se reemplacen los fluidos que lleva el radiador; drenar el líquido sin derramarlo al suelo pues en algunos casos puede llegar a contaminar, y lo mejor es depositarlo en el algún contenedor que sepas que es residuo. El constante cambio de este líquido ayuda a mejor el rendimiento del radiador, de igual manera también asegurar que la tapa del radiador esté en óptimas condiciones, lo que es muy importante y por seguridad debe encontrarse con sus sellos de seguridad y bien sellados. En promedio se recomienda que se cambie cada dos años.

Además de estos pasos debe asegurarse el revisar todas las mangueras y abrazaderas del radiador, las fugas en éstas o aunque esté mal puestas pueden llevar al mal funcionamiento del radiador y sobrecalentar el motor, al igual que otros componentes se recomienda que se cambien periódicamente. Para volver a llenar los niveles de fluido se recomienda utilizar una mezcla de 50 por ciento anticongelante y 50 por ciento agua; estos sencillos pasos pueden ayudar como mantenimiento preventivo y evitar que el auto sufra de calentamientos excesivos.