Bernie Ecclestone, el hombre que a finales de los setentas tomó las riendas de la Fórmula Uno para darle un giro comercial y hacerla la más seguida del deporte motor, declaró su intención de venderla por una cifra cercana a los 8,000 millones de dólares.
Bernie dejó en claro que el cambio de dueño podría realizarse a finales del año y que solo faltaría la aprobación de la empresa de inversiones CVC Capital Partners, de Donald Mackenzie, que es la socio mayoritaria con una participación del 35.5%.
Entre los posibles compradores están Stephen Ross, dueño de los Delfines de Miami, y el consorcio estatal Qatar Sport Investments quienes se asociarían para dirigir a la F1. En algún momento se mencionó a Dietrich Mateschitz, propietario de Red Bull, sin embargo en un comunicado la empresa de bebidas energéticas negó tan aseveración.
Por: Marcos Martínez